¿Sus pacientes toman los medicamentos que prescribimos para ellos? Ellos pueden decir que lo hacen, pero la mitad no lo hacen. La falta de adherencia atraviesa todos los niveles de la sociedad, todos los tipos de medicamentos, y todo tipo de problemas.
Mejorar la adherencia ha sido un proceso gradual en nuestra práctica. Como la mayoría de las prácticas, les pedimos a los pacientes que lleven todos sus medicamentos a cada visita al consultorio para que podamos hacerles seguimiento. Cuando empezamos un programa para mantener a los pacientes fuera de la sala de emergencia y reducir las readmisiones, nos pareció bastante acertada el realizar llamadas a cada paciente dentro de las 48 horas de recojo de medicamentos, las conversaciones eran por ejemplo: "Puedo ver que le cambiaron la furosemida de 20 mg al día a 40 mg al día. ¿Cómo le está yendo?"
El problema es que los pacientes mienten acerca de la toma de medicamentos por varias razones: no les importa si se mejoran, se sienten bien y no perciben la necesidad de tomarlos, o no quieren decepcionar a su médico y que les dé una reprimenda.
La instauración de la Escala de adherencia terapéutica de Morisky ha ayudado, obteniendo un conjunto más amplio de preguntas que podemos realizar:
- ¿Tiene todos los medicamentos que le recetaron? (Sondeo de barreras como el costo o la confusión de medicamentos.)
- ¿Entiendes por qué los está tomando?
- ¿Alguna vez se olvida de tomar sus medicamentos? (Discuta las alarmas telefónicas, poner pastillas en el velador, etc.)
- ¿Alguno de los medicamentos hace que usted se enferme?
- Si se siente peor, ¿deja de tomarlos?
- Si se siente mejor, ¿deja de tomarlos?
- Si usted tiene asma, ¿Tiene una aerocámara? ¿Lleva un inhalador de rescate (en el trabajo, en el auto, en la escuela, etc.)?
Una enfermera o asistente médico hace estas preguntas, junto con preguntas acerca de la confianza de la salud, antes de que el paciente sea visto por el médico. Registramos las respuestas para que podamos realizar un seguimiento de la adherencia con el tiempo.
Estas son algunas de las lecciones que hemos aprendido:
- Sea consciente de la tendencia a utilizar la jerga médica. En lugar de decir, "Esto va a tratar su hipertensión", diga: "Vamos a probar esto para la presión arterial alta."
- No juzgar. En lugar de decir: "¿Por qué no se están tomando su metformina?", Diga, "Tengo curiosidad por saber qué sucede cuando usted toma su metformina."
- Sea consciente de los costos. La mayoría de los pacientes no se atreven a decir que no pueden adquirir un medicamento, por lo que pida al paciente que se comunique con usted si el copago o el costo es demasiado alto.
- Buscar alguna enfermedad subyacente. Por ejemplo, los pacientes que sufren de depresión rara vez toman sus medicamentos, por lo que considere el tratamiento de la depresión en primer lugar.
- Sea claro acerca de los beneficios de la medicina. Por ejemplo, usted podría decir: "Si toma medicamentos para la diabetes y controla su azúcar en la sangre, es posible que no necesite cambiar la medida de sus lentes tan a menudo."
- Entregar las recetas de sus pacientes por correo si es posible. Ir a la farmacia a menudo es un obstáculo.
La adherencia al tratamiento es clave para mejorar la confianza de los pacientes a manejar su enfermedad, mejorar los resultados clínicos, y la reducción de la utilización de los servicios de emergencia. Hacer las preguntas correctas ha hecho una diferencia real en nuestra práctica.
BIBLIOGRAFIA
- Traducido de: Family Practice Management, 2016-09-01, Volúmen 23, Número 5, Pages 52-52.